labranza convencional


                                      labranza convencional



Por definición la labranza tradicional o convencional es la labranza que se hace tradicionalmente, en una determinada zona para un determinado cultivo.


En general se asocia al término labranza convencional con la realización de laboreos agresivos que, mal utilizados por plazos no demasiado prolongados, pueden afectar la integridad del suelo, especialmente en suelos de baja estabilidad y/o con pendiente. Por lo general, esto se maneja o se decide con mucho de costumbre o de tradición.


Cuando ejercemos una labranza agresiva sobre el suelo incorporamos los rastr y agilizamos su descomposición y la mineralización de la materia orgánica con la consecuente liberación de nitrógeno, otros nutrientes importantes y, también, de dióxido de carbono, que es uno de los gases responsables del efecto invernadero.
El fundamento por el que los primeros agricultores empezaron a laborear el suelo, fue crear un ambiente de suelo adecuado para el crecimiento de los cultivos iniciando por crear una cama adecuada para colocar la semilla bien en contacto con el suelo para que germinara rápida y uniformemente. Quizás por un exceso de celo, se refina demasiado el suelo, pero no es necesario.
Entonces, las ventajas fundamentales de la labranza convencional serían:

Control de malezas.
Liberación de nutrientes.
Control de algunas plagas.
Garantizar una rápida y uniforme emergencia del cultivo